¿Has notado que la mayoría de las personas buscamos expresarnos de manera asertiva sin realmente comprender que conlleva?
Como seres sociales que somos, gran parte de nuestro tiempo lo invertimos en comunicarnos con los demás. A lo largo del día tenemos multitud de interacciones sociales en las que es fundamental expresarnos y poner en marcha nuestras habilidades sociales.
La asertividad se define como la habilidad de expresar nuestros deseos de una manera amable, franca, abierta, directa y adecuada, logrando decir lo que queremos sin atentar contra los demás. Pero, ¿Cómo prodríamos aprender a ser más asertivos?
La asertividad no es una conducta innata que heredemos genéticamente. La asertividad forma parte de nuestro aprendizaje social, aprendemos a ser asertivos, pasivo o agresivos dependiendo de nuestros modelos de conducta y de los reforzados que hayamos sido mostrando uno u otro tipo de comunicación.
Las personas no estamos acostumbrados a este tipo de comunicación, ya sea por vergüenza o miedo de la reacción que pueda tener el otro con el que conversamos. Si te encuentras en esta situación y te cuesta ser una persona asertiva puedes seguir estas dos técnicas que te ayudarán a mejorar tus habilidades de asertividad.
- Negociación: llegar a un acuerdo con el otro, de forma que el objetivo es el beneficio mutuo. Primero identifica que puntos te gustaría negociar, escucha al otro, busquen soluciones y llévenlas acabo.
- Poder decir no: el decir no ante una petición a veces puede volverse incómodo, recuerda que todos tenemos el derecho a decir no, pero debemos prepararnos para cuando las personas nos insistan. Estas son algunas de las respuestas que podrían ayudarte a decir no, sin sentir ese miedo o incomodidad:
- Quizás estés en lo cierto, pero mi respuesta seguirá siendo la misma.
- Me agrada tu idea, pero en este momento no estoy interesado.
- Suena bien, pero tendremos que dejarlo para otra ocasión
Es importante identificar lo que sientes a través de la auto-observación, ¿Sentimos ansiedad, tensión, sudores cuando nos comunicamos? Poco a poco esto te ayudará a aceptar tus emociones y autoconocerte.
Una vez identificando tus emociones, el felicitar regularmente a los demás por lo que hacen también mejorará tu comunicación, así como, admitir tus errores y pedir disculpas cuando te equivoques.
Aplicar la asertividad se trata de practicar, notar y aceptar tus emociones cuando lo haces y seguir comunicándote porque eso te acercará al objetivo.